3/12/09

Y ahora… ¿Qué?

¿Cuántas veces nos habremos hecho esa pregunta? ¿Cuántas veces se ha terminado una etapa de nuestra vida, o una tarea, y no sabemos hacia donde encaminarnos, o cómo afrontar ese nuevo futuro inmediato? Una cuestión que angustia.

Siempre hay puntos y aparte en nuestro crecimiento personal y emocional. Esa intriga puede venir provocada por tantas situaciones... Son casos que tienen en común que el mundo, tal como lo conocías, se termina, y tienes que re-organizar tu cabeza y volver a empezar, desde cero, como un niño pequeño aprende a caminar.

No siempre tienen porque ser circunstancias negativas las que den lugar a esta cuestión temida. Podemos verlo positivamente, también historias en teoría más felices pueden provocar un sonoro “Y ahora… ¿Qué?”.

La incertidumbre nos rodea. El miedo a lo nuevo, a dar nuevos pasos, a lanzarnos.

Pero la verdad es que la vida avanza. Implacable. Y casi no hay tiempo para esta pregunta objeto del post de hoy. La vida no se para a responderte. Simplemente ocurre, sucede, transcurre y los acontecimientos, ellos solitos, te responden. Y ahora… ¿Qué? ¿Qué? ¡Pues para adelante!